Esta etapa, a nivel de kilómetros era de transición y hasta cierto punto, relajada. Íbamos a cambiar los paisajes desérticos por ambientes montañosos, a ganar bastante altitud y sobre todo, a prepararnos para el frío en la moto.
Comenzamos el día, como los demás, con todas las Harleys ordenadas esperando el paseo del día.
En el motel, un pintor del lejano oeste:
Y más de uno probándose la ropa para el frío:
Este día salimos todos juntos para hacernos la obligada foto de grupo en una antigua gasolinera. No recuerdo cuántas fotos hice aquí, pero de largo pasan de 100.
El dueño del local apareció con su coche, totalmente operativo mientras visitábamos hasta el último rincón del local.
Este coche es, junto a la Harley Davidson uno de los mayores iconos de la industria del motor norteamericana del siglo XX.
Después parada para reponer fuerzas en el General Store, una mezcla entre tienda de souvenirs y liquor store convencional.
Y aquí les compramos unas cuantas banderitas a las Harleys, para hacerlas aún más auténticas:
Millas de carretera hasta que se hace la hora de comer, en Williams, otro pueblo genuino de la route66:
Y en medio de tanto American-Way, no pude evitar comprarme si sombrero de vaquero y posar para la foto:
En este pueblo incluso tenían un pequeño museo del ferrocarril:
En Williams también conocimos a una pareja americana, que aprovechaba cualquier ocasión para salir de viaje con su Honda Goldwing. Incluso las tenían grabadas en vídeo y me regalaron dos DVD's. Una auténtica demostración de fraternidad y amabilidad entre moteros,
Para comer, American Burger, una vez más, aunque debo decir, que cada día se conseguían superar en calidad, estas hamburguesas NO saben como en España.
Ya llegando a Gran Cañón, en un aeródromo cercano, paramos al ver este espectacular bombardero americano:
Tenían un museo con unos 30 aviones, de lo más variopinto, modelos de la segunda guerra mundial, incluyendo un zero japonés, un caza alemán, un motor de un P51 Mustang, un hidroavión y hasta una fortaleza volante.
Debo decir que me salte las normas del museo y no pude resistirme a tocar el fuselaje metálico color gris metalizado de uno de ellos y mi sorpresa fue mayúscula al comprobar que hace el mismo sonido que una lata de Coca-Cola. El acongojamiento de volar en uno de esos aparatos debe ser mayúsculo.
Por la dedicación del mecánico que estaba trabajando en la restauración de algunos aviones y por el aspecto y estado de los aviones, apostaría a que la mayoría de ellos todavía están en condiciones de volar sin problemas.
No, este no volará otra vez:
Y ya en Grand Canyon, foto a un helicóptero para visitar el parque, aunque nosotros no hicimos el vuelo, una lástima:
Por último, una foto del atardecer con el reflejo del Gran Cañón en las nubes:
16 nov 2007
Kingman - Grand Canyon
Publicado por
Unknown
en
20:15
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4 comentarios:
Asi que las hamburguesas no saben igual q en espanya... mejor o peor??
Que chulo el plug-in que tienes puesto, que muestra minifotos de flickr, no? Ya me contaras como lo has hecho... jejeje.
PS: Muy buenas las fotos ;)
Hola Amigo, felicitaciones por las fotos y por el viaje. También por el efecto de las fotos (reflejo).
Te escribo por que estoy planeando para enero de 2008 un viaje a Las Vegas y sus alrededores, donde pretendo conocer la mítica 66, aunque tengo entendido que de ella queda poco. Agradecería me recomendaras que parte de esta me recomiendas conocer (entre que pueblos). También agradecería algún dato que consideres importante.
Un abrazo desde Chile,
Andrés
El avión grande no es un bombardero. Es un avión de línea aérea. Un Constellation.
Tienes razón Anónimo, no es un bombardero. Etiquetando la foto cometí el error, confundiéndolo con otro avión del museo, gracias por tu apunte.
Saludos,
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